La tríada oscura de la personalidad: maquiavelismo, narcisismo y psicopatía. Una mirada evolutiva

The dark triad of personality: Machiavellianism, narcissism and psychopathy. An evolutionary look

A tríada escura da personalidade: maquiavelismo, narcisismo e psicopatia. Uma olhada evolutiva

Fernando Renee González Moraga*

*Psicólogo. Skötare, Rättspsykiatriska regionkliniken, Växjö, Suecia. freneegm@gmail.com

Para citar este artículo / To reference this article / Para citar este artigo: González, F. R. (2015). La tríada oscura de la personalidad: maquiavelismo, narcisismo y psicopatía. Una mirada evolutiva. Revista Criminalidad, 57 (2): 253-265.

Fecha de recepción: 2015/03/27 Fecha concepto evaluación: 2015/05/09 Fecha de aprobación: 2015/06/01


Resumen

Se aborda la denominada Tríada Oscura de la Personalidad -Tríada- (maquiavelismo, narcisismo subclínico y psicopatía subclínica) desde una mirada evolutiva. El objetivo de esta investigación es revisar la evidencia que han presentado los teóricos evolucionistas sobre la Tríada, desde un acercamiento a la mirada evolutiva. Para esto, se indaga en las principales características de cada uno de estos rasgos, los instrumentos que se han utilizado para evaluarlos y las principales áreas en donde se han estudiado. La mirada evolutiva plantea que los rasgos de la Tríada son dimensionales y varían de acuerdo con las diversas estrategias que utilizan los sujetos para adaptarse a las características socioambientales en las que se desarrollan. Estos rasgos se caracterizan por presentar violencia psicológica, inhibición moral, manipulación, baja amabilidad, insensibilidad, egoísmo y dificultad para mentalizar en contextos de interacción interpersonal y social.

Palabras clave: Personalidad, psicología, psicópata, psicopatología, violencia (fuente: Tesauro de política criminal latinoamericana - ILANUD).


Abstract

What has been denominated as the Dark Triad of Personality - Triad (machiavellianism, subclinical narcissism and subclinical psychopathy is addressed here from an evolutionary look. The objective or this research is to review and revise the evidence submitted by evolutionary theorists with regard to the Triad, from an approach to the evolutionary scrutiny. For this purpose, the main characteristics in each one of these features are examined, as well as the instruments having been used to assess them, and the major areas where they have been studied. The evolutionary look states that the Triad features are dimensional and vary according to the diverse strategies employed by subjects to adapt themselves to the socioenvironmental characteristics surrounding them while they develop. These features are characterized by evidencing psychological violence, moral inhibition, manipulation, low kindness, selfishness, and difficulties to become aware or psych up in interpersonal and social interaction contexts.

Key words: Personality, psychology, psychopath, psychopathology, violence (Source: Tesauro de política criminal latinoamericana - ILANUD).


Resumo

A denominada Tríada Escura da Personalidade -Tríada- será abordada (maquiavelismo, narcisismo subclínico e psicopatia subclínica) desde uma olhada evolutiva. O objetivo desta investigação é rever a evidência que os teóricos evolucionistas apresentam sobre a Tríada, desde uma aproximação à olhada evolutiva. Para este efeito, indaga-se nas características principais de cada uma destas características, os instrumentos que foram usados para avaliá-los e as áreas principais onde são estudados. A olhada evolutiva explica que as características da Tríada são dimensionais e variam de acordo com as estratégias diversas que usam os sujeitos para se adaptar às características socioambientais nas que são desenvolvidas. Estas características determinam-se por apresentar violência psicológica, inibição moral, manipulação, baixa amabilidade, insensibilidade, egoísmo e dificuldade para mentalizar nos contextos da interação interpessoal e social.

Palavras-chave: Personalidade, psicologia, psicopata, psicopatologia, violência (fonte: Tesauro de política criminal latinoamericana - ILANUD).


Introducción

Desde la aparición de la Tríada en el original estudio de Paulhus & Williams (2002), se ha observado un creciente interés en el estudio de sus rasgos constitutivos de personalidad (maquiavelismo, narcisismo subclínico y psicopatía subclínica) en población subclínica y no patológica. Un ejemplo de este fenómeno puede comprobarse al realizar la búsqueda de "Dark Triad" en Google Académico; actualmente están disponibles más de 80.000 recursos. Los autores mencionados se propusieron como objetivo evaluar las similitudes y diferencias entre los rasgos constitutivos de la Tríada. La información recopilada les permitió determinar que no se soporta la idea de que estos rasgos son equivalentes en población normal, incluso en la no forense, en la no patológica, ni en poblaciones de alto rendimiento, lo cual hace de los rasgos de la Tríada lo suficientemente distintivos como para justificar su medida por separado. Los sujetos que poseen estos rasgos se han denominado como personalidades oscuras o que han desarrollado el lado oscuro de la personalidad, "porque las personas con estos rasgos comparten una tendencia a ser insensibles, egoístas y malévolos en sus relaciones interpersonales" (Paulhus & Williams, en Jones & Paulhus, 2009, p. 100).

Para el estudio de los rasgos de la Tríada es necesario distinguir entre muestras clínicas y subclínicas. Las primeras comprenden aquellos individuos que en la actualidad están bajo supervisión clínica o forense. En cambio, las subclínicas se refieren a distribuciones continuas en muestras comunitarias más amplias. Aunque el término implica una versión más suave, las muestras subclínicas cubren inevitablemente una gama más amplia de sujetos e incluyen en forma natural los casos extremos que se encuentran en libertad (Furnham, Richards & Paulhus, 2013). Para investigar los rasgos de la Tríada se utilizan muestras subclínicas.

El constructo maquiavelismo o personalidad manipuladora (Paulhus & Williams, 2002) surge de la interpretación que realizaron Richard Christie y Florence L. Geis (1970) del libro Il Principe de Niccolò Machiavelli (Fehr, Samsom & Paulhus, 1992; Jones & Paulhus, 2009). A partir de esta lectura, Christie & Geis (1970) crean el cuestionario Mach IV (tipo Likert) y luego el Mach V (balanceado), para evitar la deseabilidad social; sin embargo, este instrumento presentó menor fiabilidad y validez. Los sujetos que obtienen puntuaciones altas en estos instrumentos se caracterizan por ser cínicos, sin principios, creen en la manipulación interpersonal como la clave para el éxito en la vida, y se comportan de acuerdo con esto (Jones & Paulhus, 2009). Hasta la fecha, el Mach IV es el instrumento más utilizado para evaluar el maquiavelismo, debido a que su fiabilidad es satisfactoria (alrededor de 0.7), y la validez concurrente como conceptual también lo es (Bernal, 1987).

El narcisismo subclínico o normal surgió del trabajo de Raskin & Hall (1979), donde plantearon una versión subclínica del trastorno narcisista de la personalidad que había sido definido por el DSM-III (APA, 1978). A partir de sus investigaciones construyeron el Inventario de Personalidad Narcisista (NPI). En la actualidad, también está disponible la versión abreviada, denominada NPI-16 (Ames, Rose & Anderson, 2006). El narcisismo subclínico ha sido rigurosamente estudiado por Morf & Rhodewalt (2001), elaborando un modelo del procesamiento de la autorregulación del narcisismo, en el cual se explica la existencia paradójica de la grandiosidad y la vulnerabilidad presentes en el narcisismo. En este modelo se muestra el narcisismo en términos de un proceso dinámico motivado por la autoconstrucción, impulsado en gran medida por el objetivo de la autoafirmación.

El estudio de la psicopatía subclínica, al igual que el narcisismo, surge de la teoría y la práctica clínica. El origen del estudio clínico sistemático de la psicopatía aparece por primera vez en el libro The Mask of Sanity, en 1941, trabajo célebre de H. Cleckley (1988). Luego Robert Hare (1991), con el Psychopathy Checklist-Revised (PCL-R), ha generado un fructuoso y creciente desarrollo de estudios de la psicopatía en criminales. El PCL-R entiende la psicopatía como una categoría que sirve para evaluar a sujetos encarcelados o institucionalizados. Sin embargo, esto dista mucho de la realidad cotidiana a la cual los sujetos están acostumbrados a desenvolverse. Al tomar distancia de la noción patológica que ubica a este rasgo en un extremo de la normalidad, y al ser medido con un instrumento dimensional, se ha encontrado que la psicopatía presenta bajos niveles de amabilidad y responsabilidad (Furnham, Richards & Paulhus, 2013). Estos datos muestran algunas características subclínicas de la psicopatía. En este ámbito se ha utilizado la noción de psicopatía primaria y psicopatía secundaria, para comprender la psicopatía subclínica. La primaria representa los aspectos insensibles de las actitudes de los psicópatas, mientras que la secundaria constituye los aspectos penales y antisociales de la psicopatía (Jonason, Lyons & Bethell, 2014). El instrumento más usado para medir la psicopatía subclínica en la Tríada es el Self-Report Psychopathy (SRP-III) (Furnham, Richards & Paulhus, 2013), y el otro comúnmente utilizado es el Psychopathic Personality Inventory (PPI) (Lilienfeld & Andrews, 1996).

Se ha estudiado la conducta criminal en un recinto penitenciario (Cabrera, Gallardo, González & Navarrete, 2014), lo cual ha permitido establecer relaciones entre diversos grupos de criminales y el PCL-R de Robert Hare (2003). Al revisar esta investigación, se observa que el estudio se centró en una particular muestra de sujetos criminales, en la cual las cualidades asociadas al crimen son únicas y poco probables de encontrar en población no carcelaria. La cárcel es un subsistema social específico, donde la criminalidad es una cualidad vital; por lo tanto, difícilmente se podrían igualar los resultados del estudio en muestras de sujetos no criminales.

En el presente artículo se repasan los avances en psicología evolucionista, la cual tiene sus cimientos en la teoría evolucionista de Darwin (1859). Parafraseando a Furnham, Richards & Paulhus (2013), investigaciones de teóricos evolucionistas han planteado que existen personalidades oscuras que pueden prosperar como parásitos sociales, y que la teoría evolucionista puede predecir a estos subgrupos de depredadores. Como es comprensible, la perspectiva evolucionista hace hincapié en la reproducción. A partir de esta teoría, se plantea la existencia de rasgos de personalidad que conforman estrategias evolutivas que han sido transmitidas de manera exitosa, debido a que aseguran el éxito reproductivo. Por lo tanto, se entiende que los individuos difieran a lo largo de un continuo de estrategias reproductivas. Los sujetos que se caracterizan por una estrategia de vida rápida presentan énfasis en el coito. Aquellos que enfatizan en la paternidad tienen una estrategia de vida lenta. Se ha planteado que los sujetos que poseen rasgos de la Tríada tienen una estrategia de vida rápida, la cual se caracteriza por deficiencias en el control de sí mismo; estas personas a menudo presentan emparejamientos a corto plazo, egoísmo y otras manifestaciones antisociales. Los rasgos maquiavelismo y narcisismo disminuyen los aspectos socialmente indeseables y los costos de tener una estrategia de vida rápida. Por ello, estos dos últimos pueden funcionar con facilidad en la sociedad, mientras que el psicópata tiene más dificultad. Así, cada miembro de la tríada oscura explota a otros en un ambiente social único, en el que su particular marca de la explotación cruel fomenta el éxito reproductivo. Esta última afirmación será discutida más adelante.

La mirada evolutiva reconoce que los procesos mentales superiores no pueden ser explicados en toda su complejidad, de manera exclusiva desde una perspectiva biologicista. Por lo tanto, ella brinda la posibilidad de estudiar los cambios de los rasgos de personalidad a lo largo del ciclo vital, así como visualizar el desarrollo psicológico y emocional de los sujetos. Las conductas que presentan los individuos con rasgos de la Tríada han sido culturalmente catalogadas como poco deseables para el desarrollo de la vida en sociedad. Sin embargo, al estudiar estos rasgos en muestras subclínicas, se observan distintos niveles y diversas valoraciones de conductas adaptativas.

El objetivo de este artículo es revisar investigaciones que han estudiado la Tríada a partir de la perspectiva evolucionista, desde un acercamiento a la mirada evolutiva. El presente se configura como un acercamiento (no exhaustivo) a la mirada evolutiva y como una apertura dimensional al estudio de los rasgos de personalidad de la Tríada en poblaciones no patológicas y subclínicas.

Instrumentos y modelos utilizados para estudiar la tríada oscura de la personalidad

Desde su aparición, la Tríada constantemente ha sido blanco de críticas y diversos debates. Por ello, es de vital importancia conocer los principales modelos e instrumentos que han colaborado en la comprensión dimensional de los rasgos de la tríada oscura de la personalidad, y que han sido el sustento para elaborar este constructo.

  1. The Five Factor Model. Al estudiar la relación entre la Tríada y el renombrado modelo dimensional de los cinco factores de la personalidad, o los cinco grandes, compuesto por neuroticismo, extraversión, apertura a la experiencia, amabilidad y responsabilidad (Costa, McCrae & Dye, 1991), se ha encontrado que la Tríada se asocia negativamente a amabilidad y responsabilidad (Paulhus & Williams, 2002; Furnham, Richards & Paulhus, 2013). Las asociaciones entre los rasgos de la Tríada y los cinco grandes fueron para el narcisismo con baja modestia y bajo en sinceridad, mientras que en la psicopatía fueron baja deliberación y bajo sentido del deber. En relación con la conciencia, el narcisismo se asoció con logro-esfuerzo y competencia, mientras que en la psicopatía fueron bajo sentido del deber y deliberación (Miller, Dir, Gentile, Wilson, Pryor & Campbell, 2010).

  2. HEXACO. La introducción de la Tríada se produjo poco después de la construcción de un modelo de seis dimensiones de rasgos de la personalidad, el HEXACO. Este introduce al modelo de los cinco grandes el factor honestidad/humildad, que es esencial para la Tríada porque contrasta explícitamente las conductas prosociales y antisociales. Se plantea que una óptima predicción y comprensión de los criterios variables se puede lograr utilizando los factores del HEXACO, lo cual no sucede si se usan los factores del modelo de los cinco grandes (Lee & Ashton, 2014).

  3. Supernumerary Personality Inventory. La Tríada ha sido investigada en relación con los rasgos del Supernumerary Personality Inventory (SPI), ya que ambos conjuntos de variables son predominantemente distintos respecto al modelo de los cinco grandes. Veselka, Schermer & Vernon (2011) plantean una asociación entre la Tríada y la mayoría de los rasgos del SPI, sobre todo atribuibles a factores genéticos y ambientales no compartidos, excepto en el caso del maquiavelismo, en el cual surgieron factores ambientales compartidos. En esta investigación se plantea que la Tríada es un constructo que describe características explotadoras y antisociales que se extienden más allá del modelo de los cinco grandes, y que comparten un espacio teórico con los rasgos de SPI.

    Debido a la dificultad de evaluar los tres rasgos de la Tríada de forma conjunta, se han realizado importantes esfuerzos para construir instrumentos que midan estos rasgos, y que al mismo tiempo sean breves. Los dos más importantes son el Dark Triad Dirty Do zen y el Short Dark Triad.

  4. Dark Triad Dirty Do zen (DTDD). Este ha demostrado que recupera con eficiencia la información, y ha mostrado algunas pruebas de funcionamiento diferencial de escala por sexo, con un umbral de apoyo inferior para los hombres en comparación con las mujeres. Aunque los primeros tenían umbrales de respaldo ligeramente más bajos que las segundas, la diferencia sexual en general era bastante pequeña. Estos resultados se suman a una creciente literatura sobre la Tríada y sus rasgos constitutivos. Se ha resaltado la robustez psicométrica de este nuevo y eficaz instrumento (Webster & Jonason, 2013).

  5. Short Dark Triad (SD3). Tomando en cuenta la longitud de los instrumentos que se utilizan para medir la Tríada, es comprensible por qué algunos investigadores pueden ser reacios a incluir los tres rasgos en un solo estudio. Incluso al usar las versiones más cortas para evaluar cada rasgo, el número de elementos que se van a valorar es alto, lo cual dificulta la labor de investigación cuando el tiempo y el espacio son un bien escaso y preciado. En este contexto, Jones & Paulhus (2014) manifiestan que para un uso práctico se necesita un instrumento corto, válido y fiable de la Tríada; esta necesidad motivó el desarrollo de la escala Short Dark Triad (SD3). Estos autores plantean que los tres estudios que realizaron indican que el SD3 proporciona medidas eficaces, fiables y válidas de la Tríada.

La mirada evolutiva y la tríada oscura de la personalidad

La mirada evolutiva comprende el estudio de los cambios durante el ciclo vital, desde que el sujeto nace hasta que muere. En relación con los cuidados en la infancia y la Tríada (Jonason, Lyons & Bethell, 2014), se ha encontrado que la baja calidad de los cuidados maternales lleva al maquiavelismo y aspectos del narcisismo, como pretensión/exploración y liderazgo/autoridad cuando el apego seguro no se produce. El cuidado paternal de baja calidad lleva a la psicopatía secundaria, y el cuidado paterno de alta calidad se ha asociado con la dimensión de pretensión/explotación del narcisismo. Por otra parte, en la relación entre la teoría de la mente y el apego (Riquelme, Henríquez & álvarez, 2003), se ha descubierto que los cuidados en la infancia tienen un importante impacto en el proceso de mentalización. La teoría de la mente aparece como concepto en el trabajo de Premack & Woodruff (1978), defi- nida como la capacidad de comprender, predecir y explicar el comportamiento humano en términos de estados mentales internos. En estudios que relacionan la teoría de la mente con la Tríada (Stellwagen & Kerig, 2013) se ha observado que en niños de sexto y séptimo grado el narcisismo está asociado de manera positiva con la teoría de la mente, y que los rasgos insensibles, sin emoción, se asocian negativamente con la teoría de la mente. Por otra parte, la impulsividad y el maquiavelismo no estarían relacionados con la teoría de la mente.

En el meta-análisis realizado por O'Boyle, Forsyth, Banks & Story (2013) se puso a prueba la hipótesis del "genio maligno", la cual plantea que personas muy inteligentes tienden a mostrar rasgos de personalidad de explotación social. También probaron la hipótesis compensatoria, la cual señala que personas menos inteligentes compensan sus desventajas cognitivas mediante la adopción de comportamientos de manipulación. Para ello, midieron la relación entre la Tríada y la habilidad mental general. Se encontró que estas relaciones fueron moderadas, en cierta medida, por el sexo y la edad de los participantes, el tipo de muestra estudiada y la habilidad mental general. A partir de esta información, los autores aseguran que no es posible sostener ninguna de las dos hipótesis. En otro aspecto de la inteligencia, se han encontrado asociaciones negativas entre maquiavelismo e inteligencia emocional, y también con amabilidad y responsabilidad de los cinco grandes (Austin, Farrelly, Black & Moore, 2007). Además, existiría una asociación positiva entre la manipulación emocional, pero sin relación con la inteligencia emocional. Sujetos que presentan alto maquiavelismo aprueban comportamientos emocionalmente manipuladores, en la medida en que estos les proveen éxito y satisfacción personal.

Por otra parte, se ha utilizado la amabilidad de los cinco grandes para mediar y moderar la relación entre el rasgo de inteligencia emocional y el maquiavelismo (O'Connor & Athota, 2013). Se encontró que los individuos con alta inteligencia emocional tienden a tener bajos niveles de maquiavelismo, ya que por lo general son individuos de carácter positivo, cálidos, amables, altruistas, es decir, que se caracterizan por una alta amabilidad, pero no porque sean emocionalmente competentes. Además, se halló que los individuos que se perciben con alta competencia emocional tienden a ser altos en maquiavelismo, cuando son bajos en cordialidad. Por lo tanto, sujetos con alto rasgo de inteligencia emocional tienen el potencial de ser altos en maquiavelismo, pero no porque su naturaleza sea en general positiva, amable y servicial. En un estudio de Nagler, Reiter, Furtner & Rauthmann (2014) se plantea que las habilidades sociales y emocionales no siempre se utilizan para manipular a los demás. Sin embargo, el empleo de las habilidades de inteligencia emocional para la manipulación emocional en los otros se ve facilitada por personalidades oscuras, en particular por los narcisistas y psicópatas. Por lo tanto, la inteligencia emocional puede ser y es utilizada con fines maliciosos, como, e. g., el engaño, la explotación y el daño a los demás. Una "inteligencia oscura" podría estar formada por aquellos que utilizan la inteligencia emocional como una herramienta para sí mismos y con un fin manipulador.

La presencia de baja empatía es una característica central en aquellos sujetos que se desenvuelven con crueldad en su entorno, y está principalmente asociada a la psicopatía subclínica (Paulhus & Williams, 2002). Jonason, Lyons, Bethell & Ross (2013) demostraron que la presencia de baja empatía estaba relacionada con el narcisismo en las mujeres, pero con la psicopatía en hombres. Estos datos sugieren que la baja empatía es una característica de la Tríada, y que, además, se manifiesta de diferente forma en hombres y mujeres. Giammarco & Vernon (2014) plantean que el maquiavelismo y la psicopatía se caracterizan por presentar venganza emocional. El maquiavelismo y la psicopatía también presentaron baja compasión, baja toma de perspectiva y baja preocupación empática. Al relacionar la Tríada con empatía y alexitimia (Jonason & Krause, 2013) se encontró que la psicopatía se asoció con la empatía limitada general, dificultad para describir los sentimientos y el pensamiento orientado hacia el exterior. El narcisismo se relacionó con la empatía limitada y la dificultad para identificar los sentimientos afectivos, mientras que el maquiavelismo se asoció con el pensamiento orientado hacia el exterior. En otro estudio (Cairncross, Veselka, Schermer & Vernon, 2013) los resultados revelaron que la alexitimia se asoció en forma positiva con la psicopatía y el maquiavelismo, y de manera negativa con el narcisismo. Un análisis genético del comportamiento demostró que las correlaciones fenotípicas fueron principalmente atribuibles a factores genéticos comunes y a factores ambientales comunes no compartidos.

El narcisismo y la psicopatía se han relacionado con la impulsividad (Jones & Paulhus, 2011). Lo que queda poco claro es el patrón de las asociaciones que la Tríada tiene con tipos funcionales y disfuncionales de la impulsividad. La psicopatía se asocia estrechamente con la impulsividad disfuncional, mientras que el narcisismo se relacionó con la impulsividad funcional. Parece que la impulsividad narcisista implica una participación social más arriesgada, mientras que la impulsividad psicopática se deriva de una baja autorregulación. El maquiavelismo no se asoció con ningún tipo de impulsividad (Jones & Paulhus, 2011, 2009).

Se han estudiado los rasgos de la Tríada en relación con la impulsividad y la búsqueda de sensaciones (Crysel, Crosier & Webster, 2013). Se distingue impulsividad y búsqueda de sensaciones en que la primera tiene relación con llevar a cabo una acción sin pensar en las consecuencias hacia el futuro, mientras que la segunda implica la búsqueda de experiencias nuevas y estimulantes, y la voluntad de asumir los riesgos que implican estas experiencias (Zuckerman, 1994). Se descubrió que los rasgos de la Tríada facilitan a corto plazo las tácticas sociales de explotación, en particular las conductas de riesgo, como las apuestas en el blackjack y el descuento temporal de dinero (temporal discounting of money). Este estudio mostró una relación positiva entre los rasgos de la tríada oscura y la impulsividad y búsqueda de sensaciones. Cuando se presentó una amenaza en el ego, el narcisismo se relacionó con el descuento temporal de dinero.

En palabras de Fritz Heider, en 1958 (citado en van Dijk, van Koningsbruggen, Ouwerkerk & Wesseling, 2011), el schadenfreude es una emoción discordante en una gran cantidad de otras personas. El schadenfreude provoca una emoción positiva en quien observa una experiencia negativa en otro sujeto. Las personas con schadenfreude comparten la tendencia a ser insensibles, egoístas y malévolas en sus relaciones interpersonales, y sienten placer al observar desgracias en otras personas. En esta línea, se ha planteado que las puntuaciones más altas en la Tríada se asociaron con el aumento del autorreporte de schadenfreude en la vida diaria y una propensión a buscar estímulos relacionados con alegrarse del mal ajeno (Porter, Bhanwer, Woodworth & Black , 2014), particularmente en la psicopatía (James, Kavanagh, Jonason, Chonody & Scrutton, 2014). Estos hallazgos sugieren un conjunto "oscuro" de personalidades, conductas y emociones, que presentan altas puntuaciones en la Tríada y se caracterizan por realizar actividades antisociales, y experimentan una mayor satisfacción por la desgracia ajena.

La información recopilada con relación a cómo perciben a los otros los sujetos con rasgos de la Tríada, permite visualizar cómo es su interacción interpersonal y qué características buscan en los demás para elegir a sus víctimas. Black, Woodworth & Porter (2014) plantean que las personalidades oscuras son más propensas a percibir a sus víctimas como desagradables, con baja autoestima, muy neuróticas, deprimidas y ansiosas. Los psicópatas generalmente perciben sus objetivos como menos afables, muy neuróticos, deprimidos y ansiosos. Los maquiavélicos perciben sus objetivos más neuróticos, ansiosos y deprimidos. Por último, los narcisistas perciben sus objetivos como bajos en la apertura a nuevas experiencias, conscientes, extrovertidos y altos en depresión.

Es un problema creciente que instituciones bancarias e individuos sin escrúpulos arriesguen el dinero de otros para beneficio personal. Esto ha generado pérdidas cuantiosas y ha afectado a mucha gente que ha confiado sus ahorros a terceros. En este ámbito, los tres rasgos de la Tríada predijeron la presencia de la conducta financiera egoísta en los juegos de azar. Los psicópatas fueron imprudentes, los narcisistas presentaron exceso de confianza y los maquiavélicos fueron estratégicos. Los psicópatas apuestan el dinero de otras personas, pero no el propio, en juegos que inevitablemente resultan en pérdidas, y ahora se sabe que los narcisistas pierden más dinero de otras personas (Jones, 2013). Se plantea que cuando no existe ninguna amenaza de castigo, los tres tipos de individuos producen algún resultado financiero negativo para los demás cuando se les confía el dinero de otras personas. Además, los individuos con alta psicopatía persisten en la mala conducta financiera, incluso en presencia de castigos claros y probables (Jones, 2014).

La Tríada se asocia con el utilitarismo (Djeriouat & Trémolière, 2014). Las inclinaciones utilitarias son expresadas por una preocupación menor por el principio de no causar daño y las conductas prosociales. La psicopatía sugiere un valor predictivo más fuerte en la explicación del juicio utilitario. Los rasgos de la Tríada tomados en conjunto sugieren que la inclinación utilitaria es una inhibición moral. En particular, las decisiones de los psicópatas se derivan de su falta de preocupación empática y prosocial; entonces, es probable que la inclinación utilitaria sea un efecto secundario de minimizar la importancia de la moral.

En consecuencia, las inclinaciones utilitarias de los psicópatas no deben ser equiparadas con las decisiones de los no psicópatas, que buscan verdaderamente maximizar la utilidad social.

Se ha demostrado que el rasgo de amabilidad de los cinco grandes es el predictor más importante de la violencia en la psicopatía y el maquiavelismo. Respecto al narcisismo, no se encontró ninguna relación. De acuerdo con esto, la presencia de baja amabilidad, tanto en la psicopatía como en el maquiavelismo, sería antecedente que daría cuenta de una alta probabilidad de la aparición de conductas violentas (Pailing, Boon & Egan, 2014). En un estudio realizado por Pozueco & Moreno (2013) se ha constatado que el principal tipo de malos tratos que suelen perpetrar los sujetos que presentan rasgos de la Tríada en el ámbito de las relaciones de pareja es la violencia de carácter psicológico.

El vínculo entre la Tríada y el emparejamiento con fines sexuales a corto plazo fue más fuerte para los hombres que para las mujeres. Esto indicaría que en los hombres los rasgos de la Tríada facilitarían los encuentros de sexo casual o tener relaciones sexuales tras un corto período de emparejamiento (Jonason, Li, Webster & Schmitt, 2009). El narcisista, el maquiavélico ni el psicópata fueron percibidos como personas particularmente atractivas. Sin embargo, el narcisista fue juzgado, en relación con el psicópata y el maquiavélico, como el más atractivo. El maquiavélico y el psicópata se juzgaron de manera casi idéntica. Se plantea que los narcisistas fueron considerados como más atractivos, debido a que en los países occidentales las personas son más individualistas, y algunos comportamientos narcisistas (como, e. g., ser encantador, el liderazgo y la audacia) pueden ser deseados, y no existiría una predisposición negativa hacia ellos (Rauthmann & Kolar, 2013). Por su parte, Carter, Campbell & Muncer (2014b) descubrieron que los rasgos de la Tríada en los hombres atraen a las mujeres. Se encontró que las mujeres clasifican a los hombres que obtienen altos puntajes en la Tríada como significativamente más atractivos.

Se han asociado los rasgos de la Tríada con tres tipos de tácticas para anular a sus competidores sexuales (Goncalves & Campbell, 2014). A la hora de competir con rivales por una pareja sexual, las puntuaciones altas en maquiavelismo se asocian con un estilo de anulación grosero. El narcisismo se relacionó con un estilo de anulación mediante el cual tratan de eclipsar a sus competidores en diferentes situaciones (deportes, dominio y fuerza). Por último, la psicopatía se vinculó con las tácticas que avalan el daño de la reputación de sus rivales. En un estudio, Jones & Weiser (2014) descubrieron que los tres rasgos de la Tríada se caracterizan por presentar infidelidad, y que además esta se expresa de diferente forma en hombres y mujeres. La psicopatía fue el principal predictor de la infidelidad en los hombres, mientras que la psicopatía y el maquiavelismo predijeron la infidelidad en las mujeres. En este estudio se observó también que el maquiavelismo no predijo la disolución de la pareja después de la infidelidad, mientras que la psicopatía si lo hizo. Hasta el momento, al parecer los individuos maquiavélicos son propensos a mantener una relación con independencia de la infidelidad, posiblemente debido a su carácter estratégico (cauteloso y flexible).

Para Baughman, Jonason, Lyons & Vernon (2014), los psicópatas y maquiavélicos se vinculan a la propensión a mentir en diferentes contextos, incluyendo el coito y la deshonestidad académica. Estos autores plantean que los psicópatas experimentan más emociones positivas relacionadas con la mentira, y los maquiavélicos presentan una mayor cantidad de esfuerzo cognitivo asociado al engaño. Jonason, Lyons, Baughman & Vernon (2014) encontraron que los psicópatas y los maquiavélicos estaban vinculados a decir más mentiras; la psicopatía se asoció a decir mentiras sin razón, y el maquiavelismo estaba relacionado con decir mentiras blancas. El narcisismo, en cambio, estaba vinculado a la mentira para beneficio propio y la habilidad de autorreporte para mentir. Jonason, Wee, Li & Jackson (2014) estudiaron los intereses vocacionales en relación con los rasgos de la Tríada, y encontraron que los psicópatas están más interesados en carreras realistas y prácticas, los narcisistas, en las carreras artísticas, emprendedoras y sociales, y los maquiavélicos tienen más interés en evitar las carreras que involucran cuidar a los demás.

En el ámbito laboral, se han investigado las conductas de las personalidades oscuras, lo cual ha permitido mostrar los niveles de interés y desarrollo dentro de las organizaciones. Un aspecto relevante son los comportamientos contraproducentes en el trabajo, que se han definido como toda conducta intencionalmente dañina por parte de un miembro de la organización, considerada por esta como contraria para sus intereses y los de sus trabajadores (Gruys & Sackett, 2003). Se ha encontrado que la psicopatía, además de los rasgos de amabilidad y responsabilidad de los cinco grandes, es importante para predecir los comportamientos contraproducentes en el trabajo (Scherer, Baysinger, Zolynsky & LeBreton, 2013). Por otra parte, la sensibilidad de equidad se define como un rasgo de personalidad unidimensional, que se basa en las proporciones preferidas de un individuo como resultado de lo que se entrega y recibe en el trabajo (Huseman, Hatfield & Miles, 1987). Al indagar en el lado oscuro de la sensibilidad de equidad, se ha descubierto que con esta se relacionaron negativamente el maquiavelismo y la psicopatía , los cuales, según estos hallazgos, pueden tener importantes implicaciones sobre cómo se percibe la equidad en el lugar de trabajo. Maquiavélicos y psicópatas están centrados en obtener lo mayor que puedan de su organización, al tiempo que entregan lo menos posible (Woodley & Allen, 2014).

El vínculo de la Tríada con las redes sociales sugiere que comportamientos tales como la autopromoción, la frialdad emocional, la duplicidad y la agresividad se expresan cuando los individuos transmiten estados actuales o hacen declaraciones escritas en Facebook. De esta forma se disminuye la empatía y se promueven conductas de automejora de sí mismos. Así, los psicópatas y narcisistas suelen tener éxito en breves interacciones, mediante el aprovechamiento de la gente. Al mismo tiempo, los usuarios de Facebook reportan que se sienten motivados a utilizar la red social con el fin de beneficiarse de la interacción con los demás, el chisme y monitorear a los miembros de su grupo social. Entonces, es plausible sugerir que Facebook sirve como una plataforma para la competencia social, en donde algunos usuarios expresan sus rasgos más oscuros (Garcia & Sikström, 2014). Otro estudio concluyó que la intensidad en Facebook y la psicopatía predicen la agresión cibernética en adolescentes (Pabian, De Backer & Vandebosch, 2015).

Discusión

En este artículo se ha planteado el objetivo de presentar un acercamiento al estudio de la tríada oscura de la personalidad y sus rasgos constitutivos (maquiavelismo, narcisismo y psicopatía) desde una mirada evolutiva, la cual plantea que los rasgos de la Tríada son dimensionales y varían de acuerdo con las características socioambientales en las que se desarrollan las personas.

Las características fundamentales de los rasgos de la Tríada, en muestras no clínicas, indican que comparten un núcleo común de baja amabilidad, antipatía y desagrado (Paulhus & Williams, 2002). De hecho, los maquiavélicos y narcisistas pueden ser más irritantes en el contacto interpersonal, que una amenaza. En cambio, la psicopatía subclínica presenta una autovisión positiva y falta de ansiedad, lo cual puede ser visto como características adaptativas en un sentido intrapsíquico. La conducta antisocial es predictor de la psicopatía, pero no del narcisismo o el maquiavelismo.

Se plantea que los rasgos de la Tríada son esencialmente desadaptativos; sin embargo, también se ha propuesto que estos rasgos pueden conferir beneficios positivos individuales de carácter reproductivo y de supervivencia (Jonason, Webster, Schmitt, Li & Crysel, 2012). En este sentido, la expresión fenotípica de la Tríada podría ser el resultado de diferentes estrategias evolutivas (Jonason, Lyons & Bethell, 2014). Estas características de los rasgos de la Tríada pueden ser ejemplos de desarrollo plástico y estrategias condicionadas, provocadas por un entorno social severo en la niñez, como el cuidado de baja calidad de los padres. También, a estas características oscuras se les ha asociado un rendimiento cognitivo óptimo, que les permite especializarse en la vida nocturna, lo cual les permitiría explotar a los demás por medio de una "estrategia tramposa", aprovechando la poca luminosidad, la escasa vigilancia y el reducido procesamiento cognitivo de las personas madrugadoras (Jonason, Jones & Lyons, 2013).

De acuerdo con la noción de que los individuos difieren a lo largo de un continuo de estrategias reproductivas , se plantea que los sujetos con rasgos de la Tríada poseen una estrategia de vida rápida, debido a que presentan un énfasis en el coito por sobre la paternidad. Estos individuos se caracterizan por bajo autocontrol, estrategias que facilitan el coito a corto plazo, egoísmo y otras manifestaciones antisociales. Ligeros rasgos de maquiavelismo y narcisismo ayudarían a disminuir los aspectos socialmente indeseables y costosos de tener una estrategia de vida rápida. Por esto, las personalidades maquiavélicas y narcisistas pueden funcionar con mayor facilidad en sociedad, en relación con los psicópatas. Así, cada miembro de la tríada oscura explota de forma insensible a los otros, en un ambiente social único, fomentando y facilitando el éxito reproductivo (Furnham, Richards & Paulhus, 2013). Las personalidades oscuras se involucran en relaciones interpersonales relativamente superficiales, y evalúan a los otros de manera negativa, debido a que por lo general perciben todos sus objetivos como débiles y vulnerables a la victimización. Presentan deficiencias en la capacidad para evaluar con precisión rasgos de personalidad y estados emocionales de los otros. Aunque pueden ser explotadores prolíficos de los demás, no son expertos en la identificación de la vulnerabilidad emocional. En cambio, como perciben a todos como débiles y emocionales, los consideran potencialmente vulnerables. Se ha propuesto que en lugar de ser buenos lectores de los estados emocionales de los otros, las personalidades oscuras confían en sus rasgos de personalidad y físicos para atraer a víctimas vulnerables, o adoptan una cantidad (sobre la calidad) de estrategias con el fin de encontrar a sus víctimas, para luego usar tácticas de manipulación activas para explotarlas (Black, Woodworth & Porter, 2014).

La Tríada ha demostrado, respecto de los hombres, ser un factor importante en relación con el atractivo sexual, estrategias de reproducción, estrategias evolutivas y diferencias individuales (Carter, Campbell & Muncer, 2014b). Sin embargo, cabe destacar que se ha exagerado el papel de la Tríada como predictor de los encuentros sexuales casuales; tanto es así, que se ha afirmado que la preferencia masculina por los encuentros sexuales casuales no se explicaría por la Tríada (Carter, Campbell & Muncer, 2014a). Los maquiavélicos poseen un estilo de personalidad manipuladora, la cual generalmente implica una falta de moralidad y preocupación por los sentimientos de los demás. Por otro lado, los narcisistas poseen una necesidad agobiante por tener éxito y ser vistos en una posición de superioridad, en comparación con otros, y van a llegar a los extremos para hacer valer su supremacía percibida sobre los demás. Los psicópatas reflejan un estilo de personalidad fría y emocionalmente vacía, tienen poca o ninguna preocupación por los demás y no sienten remordimiento al causar daño emocional o psicológico (Goncalves & Campbell, 2014).

Desde la perspectiva evolucionista, los hombres pagan menos costos y ganan más que las mujeres, al incurrir en un enfoque de explotación a la vida (Jonason et ál., 2009). Un claro ejemplo de esto viene de la mano de la psicopatía, debido a que son los peores administrando el dinero ajeno, lo cual a menudo le cuesta mucho más dinero al dueño de los fondos que al administrador de ellos; sin embargo, persisten en esta conducta (Jones, 2014). Continuando con la afirmación de que los rasgos de la tríada oscura podrían ser adaptaciones para la explotación especializada en los hombres, se han encontrado diferencias entre estos y las mujeres en relación con la mentira (Jonason, Lyons, Baughman & Vernon, 2014). E. g., el carácter estratégico ayuda a los maquiavélicos a evitar la detección de la infidelidad, incluso cuando se ven atrapados. Estos individuos suavizan los conflictos y tienden a prosperar cuando las tensiones y emociones son fuertes (Christie & Geis, 1970; Jones & Weiser, 2014).

Para aquellas personas que han estado obligadas a vivir la vida en el momento resulta ventajoso poseer baja empatía y alta alexitimia (Jonason & Krause, 2013), debido a que han desarrollado mecanismos de adaptación de dimorfismo sexual, en consonancia con los objetivos evolutivos dispares que subyacen a los rasgos de la Tríada. Así, también, la empatía limitada puede ser beneficiosa para quienes participan de forma antagónica y explotadora en la sociedad. Puede ser que la empatía limitada sea instrumental en la implementación exitosa de estrategias socialmente aversivas, que se encuentran en personas que puntúan alto en la Tríada (Jonason et ál., 2013).

Para Furnham, Richards, Rangel & Jones (2014) es fundamental que en el desarrollo de futuras investigaciones relacionadas con la Tríada se afronte el desafío de definir los límites de sus rasgos constitutivos de otras personalidades malévolas, como la sádica y la dominancia social. Estos rasgos han demostrado un núcleo cruel-manipulador, el cual parece ser el sello distintivo de la personalidad malévola. Por otra parte, Jones & Paulhus (2014) realizan una dura crítica al Dark Triad Dirty Dozen (DTDD), al afirmar que este instrumento presume que las personalidades maquiavélicas son impulsivas, lo cual es inconsistente con el concepto original (Jones & Paulhus, 2009). En este contexto, los autores han desarrollado un instrumento corto, válido y fiable de la Tríada, la escala Short Dark Triad (SD3), cuya reciente construcción propone un desarrollo aún mayor de estudios que profundicen en las características particulares de cada rasgo, así como plantea la posibilidad de poner a prueba sus rendimientos específicos y limitaciones en poblaciones subclínicas.

Se observa que los investigadores que adoptan una perspectiva evolucionista han caracterizado a la Tríada como un estilo interpersonal explotador, debido a una estrategia de vida rápida. Sin embargo, no todas las investigaciones han apoyado esta idea. Se ha postulado que distintos elementos asociados a la Tríada pueden reflejar diferentes estrategias de vida (McDonald, Donnellan & Navarrete, 2012), definidas como: (1) estrategia de vida rápida, que incluye la impulsidad antisocial de la psicopatía, la pretensión/exploración del narcisismo, maquiavelismo, sociosexualidad sin restricciones y la agresión, y (2) estrategia de vida lenta, que comprende el dominio sin miedo de la psicopatía y tanto el liderazgo/ autoridad como el exhibicionismo grandioso del narcisismo. Tanto la psicopatía como el narcisismo tienen componentes asociados a estrategias de vida rápida y de vida lenta. Además, al revisar estudios que investigan los cuidados en la infancia y la Tríada (Jonason, Lyons & Bethell, 2014), se ha sugerido que la calidad del cuidado parental lleva a patrones de apego que pueden conducir a diferentes aspectos de la Tríada, lo cual es un importante indicador de que los cuidados tempranos en la infancia por parte de figuras significativas influyen en el desarrollo de los rasgos de la Tríada. La evidencia presentada, a partir de la mirada evolutiva, provee datos que permiten cuestionar la hipótesis evolucionista referida a que los rasgos de la Tríada se expresarían o se transmitirían exclusivamente con un fin reproductivo.

Conclusión

En este estudio se ha intentado presentar un acercamiento a la mirada evolutiva, tomando como referencia el estudio de los rasgos de la Tríada (maquiavelismo, narcisismo y psicopatía). La Tríada ha dado lugar a un creciente interés en el desarrollo de investigaciones de los rasgos de personalidad en población subclínica. Esto ha permitido plantear que existen diferencias evolutivas a partir de los primeros años de vida, las cuales varían de acuerdo con la calidad de la relación con las figuras signifi- cativas. Se han observado diferencias y tendencias de los adolescentes en las redes sociales. También se han estudiado las diferencias de acuerdo con el sexo en diversos contextos sociales, en donde estos rasgos presentan rendimientos particulares al momento de desenvolverse y adaptarse a la sociedad. Más que un peligro para la integridad física de los otros, se sugiere que la Tríada es un factor predictor para la violencia psicológica, inhibición moral, manipulación, baja amabilidad, insensibilidad, egoísmo y dificultad para mentalizar en contextos de interacción interpersonal y social. En este panorama, el Short Dark Triad (SD3) podría facilitar el desarrollo de nuevos estudios que evalúen la Tríada, debido a que se caracteriza por ser un instrumento de aplicación breve, válido y fiable.

Los puntos para aclarar en el futuro tienen que ver con la importancia de la Tríada en la tendencia a tener relaciones sexuales tras un breve período de emparejamiento, y la preferencia para encuentros sexuales casuales, que se ha atribuido a los hombres que poseen estos rasgos. Asimismo, revisar los límites y diferencias conceptuales de los rasgos de la Tríada con otros rasgos, como el sádico y la dominancia social. También continuar visualizando las características socioambientales que predisponen a las personas a desarrollar los rasgos de la Tríada. En este sentido, la importancia de la mirada evolutiva radica en que es una propuesta intermedia entre las explicaciones de corte biologicista y sociales, que cuestiona la hipótesis evolucionista en cuanto al excesivo énfasis en la reproducción y la estrategia de vida rápida.

Queda un largo camino por recorrer en las profundidades de las mentes oscuras, y mucho por descubrir sobre los rasgos dimensionales de la personalidad en relación con su capacidad de facilitar la adaptación de las personas a diversos y complejos contextos sociales.


Referencias

American Psychiatric Association (1978). Diagnostic and statistical manual of mental disorders: DSM-III draft/prepared by the Task Force on Nomenclature and Statistics of the American Psychiatric Association. American Psychiatric Association.

Ames, D. R., Rose, P. & Anderson, C. P. (2006). The NPI-16 as a short measure of narcissism. Journal of Research in Personality, 40 (4): 440-450.

Austin, E. J., Farrelly, D., Black, C. & Moore, H. (2007). Emotional intelligence, Machiavellianism and emotional manipulation: Does EI have a dark side? Personality and Individual Differences, 43 (1): 179-189.

Baughman, H. M., Jonason, P. K., Lyons, M. & Vernon, P. A. (2014). Liar liar pants on fire: Cheater strategies linked to the Dark Triad. Personality and Individual Differences, 71: 35- 38.

Bernal, A. O. (1987). Maquiavelismo y sociedad contemporánea: una perspectiva psicosocial de la personalidad maquiavélica. Revista Pedagógica (3): 95-107.

Black, P. J., Woodworth, M. & Porter, S. (2014). The Big Bad Wolf? The relation between the Dark Triad and the interpersonal assessment of vulnerability. Personality and Individual Differences, 67: 52-56.

Cabrera, J., Gallardo, R., González, F. R. & Navarrete, R. (2014). Psicopatía y delincuencia: comparaciones y diferencias entre ofensores sexuales y delincuentes comunes en una cárcel chilena. Revista Criminalidad, 56 (2): 229-245.

Cairncross, M., Veselka, L., Schermer, J. A. & Vernon, P. A. (2013). A behavioral genetic analysis of alexithymia and the Dark Triad traits of personality. Twin Research and Human Genetics, 16 (03): 690-697.

Carter, G. L., Campbell, A. C. & Muncer, S. (2014a). The Dark Triad: Beyond a 'male' mating strategy. Personality and Individual Differences, 56: 159-164.

Carter, G. L., Campbell, A. C. & Muncer, S. (2014b). The Dark Triad personality: Attractiveness to women. Personality and Individual Differences, 56: 57-61.

Christie, R. & Geis, F. L. (1970). Studies in Machiavellianism. New York: Academic Press.

Cleckley, H. (1988). The mask of sanity (5th Ed.). St.Louis, MO: Mosby, Co.

Costa Jr., P. T., McCrae, R. R. & Dye, D. A. (1991). Facet scales for agreeableness and conscientiousness: a revision of the NEO personality inventory. Personality and Individual Differences, 12 (9): 887-898.

Crysel, L. C., Crosier, B. S. & Webster, G. D. (2013). The Dark Triad and risk behavior. Personality and Individual Differences, 54 (1): 35-40.

Darwin, C. (1859). On the Origin of Species by Means of Natural Selection, or The Preservation of Favoured Races in the Struggle for Life. London/Die Entstehung der Arten durch natürliche Zuchtwahl, Leipzig o.J.

Djeriouat, H. & Trémolière, B. (2014). The Dark Triad of personality and utilitarian moral judgment: the mediating role of Honesty/Humility and Harm/Care. Personality and Individual Differences, 67: 11-16.

Fehr, B., Samsom, D. & Paulhus, D. L. (1992). The construct of Machiavellianism: Twenty years later. In C. D. Spielberger & J. N. Butcher (Eds.). Advances in personality assessment (Vol. 9, pp. 77-116). Hillsdale, NJ: Erlbaum.

Furnham, A., Richards, S. C. & Paulhus, D. L. (2013). The Dark Triad of personality: A 10 year review. Social and Personality Psychology Compass, 7 (3): 199-216.

Furnham, A., Richards, S., Rangel, L. & Jones, D. N. (2014). Measuring malevolence: Quantitative issues surrounding the Dark Triad of personality. Personality and Individual Differences, 67: 114-121.

Garcia, D. & Sikström, S. (2014). The dark side of Facebook: Semantic representations of status updates predict the Dark Triad of personality. Personality and Individual Differences, 67: 92-96.

Giammarco, E. A. & Vernon, P. A. (2014). Vengeance and the Dark Triad: The role of empathy and perspective taking in trait forgivingness. Personality and Individual Differences, 67: 23-29.

Goncalves, M. K. & Campbell, L. (2014). The Dark Triad and the derogation of mating competitors. Personality and Individual Differences, 67: 42-46.

Gruys, M. L. & Sackett, P. R. (2003). Investigating the dimensionality of counterproductive work behavior. International Journal of Selection and Assessment, 11 (1): 30-42.

Hare, R. D. (1991). The Hare Psychopathy Checklist- Revised. Toronto: Multi-Health Systems.

Hare, R. D. (2003). Manual for the Revised Psychopathy Checklist (2nd Ed.). Toronto, ON, Canada: Multi-Health Systems.

Huseman, R. C., Hatfield, J. D. & Miles, E. W. (1987). A new perspective on equity theory: The equity sensitivity construct. Academy of Management Review, 12 (2): 222-234.

James, S., Kavanagh, P. S., Jonason, P. K., Chonody, J. M. & Scrutton, H. E. (2014). The Dark Triad, schadenfreude, and sensational interests: Dark personalities, dark emotions, and dark behaviors. Personality and Individual Differences, 68: 211-216.

Jonason, P. K., Jones, A. & Lyons, M. (2013). Creatures of the night: Chronotypes and the Dark Triad traits. Personality and Individual Differences, 55 (5): 538-541.

Jonason, P. K. & Krause, L. (2013). The emotional deficits associated with the Dark Triad traits: Cognitive empathy, affective empathy, and alexithymia. Personality and Individual Differences, 55 (5): 532-537.

Jonason, P. K., Li, N. P., Webster, G. D. & Schmitt, D. P. (2009). The dark triad: Facilitating a short-term mating strategy in men. European Journal of Personality, 23 (1): 5-18.

Jonason, P. K., Lyons, M., Bethell, E. J. & Ross, R. (2013). Different routes to limited empathy in the sexes: Examining the links between the Dark Triad and empathy. Personality and Individual Differences, 54 (5): 572-576.

Jonason, P. K., Lyons, M., Baughman, H. M. & Vernon, P. A. (2014). What a tangled web we weave: The Dark Triad traits and deception. Personality and Individual Differences, 70: 117-119.

Jonason, P. K., Lyons, M. & Bethell, E. (2014). The making of Darth Vader: Parent-child care and the Dark Triad. Personality and Individual Differences, 67: 30-34.

Jonason, P. K., Webster, G. D., Schmitt, D. P., Li, N. P. & Crysel, L. (2012). The antihero in popular culture: Life history theory and the dark triad personality traits. Review of General Psychology, 16 (2): 192.

Jonason, P. K., Wee, S., Li, N. P. & Jackson, C. (2014). Occupational niches and the Dark Triad traits. Personality and Individual Differences, 69: 119-123.

Jones, D. N. (2013). What's mine is mine and what's yours is mine: The Dark Triad and gambling with your neighbor's money. Journal of Research in Personality, 47 (5): 563-571.

Jones, D. N. (2014). Risk in the face of retribution: Psychopathic individuals persist in financial misbehavior among the Dark Triad. Personality and Individual Differences, 67: 109-113.

Jones, D. N. & Paulhus, D. L. (2009). Machiavellianism. In M. R. Leary & R. H. Hoyle (Eds.). Handbook of Individual Differences in Social Behavior (pp. 93-108). New York: Guilford.

Jones, D. N. & Paulhus, D. L. (2011). The role of impulsivity in the Dark Triad of personality. Personality and Individual Differences, 51 (5): 679-682.

Jones, D. N. & Paulhus, D. L. (2014). Introducing the Short Dark Triad (SD3): A Brief Measure of Dark Personality Traits. Assessment, 21 (1): 28-41.

Jones, D. N. & Weiser, D. A. (2014). Differential infidelity patterns among the Dark Triad. Personality and Individual Differences, 57: 20-24.

Lee, K. & Ashton, M. C. (2014). The Dark Triad, the Big Five, and the HEXACO model. Personality and Individual Differences, 67: 2-5.

Lilienfeld, S. O. & Andrews, B. P. (1996). Development and preliminary validation of a self-report measure of psychopathic personality traits in noncriminal populations. Journal of Personality Assessment, 66: 488-524.

McDonald, M. M., Donnellan, M. B. & Navarrete, C. D. (2012). A life history approach to understanding the Dark Triad. Personality and Individual Differences, 52 (5): 601-605.

Miller, J. D., Dir, A., Gentile, B., Wilson, L., Pryor, L. R. & Campbell, W. K. (2010). Searching for a vulnerable dark triad: Comparing factor 2 psychopathy, vulnerable narcissism, and borderline personality disorder. Journal of Personality, 78 (5): 1529-1564.

Morf, C. C. & Rhodewalt, F. (2001). Expanding the dynamic self-regulatory processing model of narcissism: Research directions for the future. Psychological Inquiry, 12 (4): 243-251.

Nagler, U. K., Reiter, K. J., Furtner, M. R. & Rauthmann, J. F. (2014). Is there a "dark intelligence"? Emotional intelligence is used by dark personalities to emotionally manipulate others. Personality and Individual Differences, 65: 47-52.

O'Boyle, E. H., Forsyth, D., Banks, G. C. & Story, P. A. (2013). A meta-analytic review of the Dark Triad-intelligence connection. Journal of Research in Personality, 47 (6): 789-794.

O'Connor, P. J. & Athota, V. S. (2013). The intervening role of Agreeableness in the relationship between Trait Emotional Intelligence and Machiavellianism: Reassessing the potential dark side of EI. Personality and Individual Differences, 55 (7): 750-754.

Pabian, S., De Backer, C. J. & Vandebosch, H. (2015). Dark Triad personality traits and adolescent cyber-aggression. Personality and Individual Differences, 75: 41-46.

Pailing, A., Boon, J. & Egan, V. (2014). Personality, the Dark Triad and violence. Personality and Individual Differences, 67: 81-86.

Paulhus, D. L. & Williams, K. M. (2002). The dark triad of personality: Narcissism, Machiavellianism, and psychopathy. Journal of Research in Personality, 36 (6): 556-563.

Porter, S., Bhanwer, A., Woodworth, M. & Black, P. J. (2014). Soldiers of misfortune: An examination of the Dark Triad and the experience of schadenfreude. Personality and Individual Differences, 67: 64-68.

Pozueco, J. M. & Moreno, J. M. (2013). Psicopatía, maquiavelismo, narcisismo y maltrato psicológico. Boletín de Psicología (107): 91-111.

Premack, D. & Woodruff , G. (1978). Does the chimpanzee have a theory of mind? Behavioral and Brain Sciences, 1 (4): 515-526.

Raskin, R. N. & Hall, C. S. (1979). A narcissistic personality inventory. Psychological Reports, 45 (2): 590-590.

Rauthmann, J. F. & Kolar, G. P. (2013). The perceived attractiveness and traits of the Dark Triad: Narcissists are perceived as hot, Machiavellians and psychopaths not. Personality and Individual Differences, 54 (5): 582-586.

Riquelme, E. H., Henríquez, C. & álvarez, B. (2003). Relación entre estilos de apego y teoría de la mente. Psykhe, 12 (1): 73-81.

Scherer, K. T., Baysinger, M., Zolynsky, D. & LeBreton, J. M. (2013). Predicting counterproductive work behaviors with sub-clinical psychopathy: Beyond the Five Factor Model of personality. Personality and Individual Differences, 55 (3): 300-305.

Stellwagen, K. K. & Kerig, P. K. (2013). Dark triad personality traits and theory of mind among school-age children. Personality and Individual Differences, 54 (1): 123-127.

Van Dijk, W. W., van Koningsbruggen, G. M., Ouwerkerk, J. W. & Wesseling, Y. M. (2011). Self-esteem, self-affirmation, and schadenfreude. Emotion, 11 (6): 1445.

Veselka, L., Schermer, J. A. & Vernon, P. A. (2011). Beyond the Big Five: The dark triad and the supernumerary personality inventory. Twin Research and Human Genetics, 14 (2): 158- 168.

Webster, G. D. & Jonason, P. K. (2013). Putting the "IRT" in "Dirty": Item Response Theory analyses of the Dark Triad Dirty Dozen-An efficient measure of narcissism, psychopathy, and Machiavellianism. Personality and Individual Differences, 54 (2): 302-306.

Williams, K. M., Spidel, A. & Paulhus, D. L. (2005). Sex, lies, and more lies: Exploring the intimate relationships of subclinical psychopaths. In meeting of the Society for the Scientific Study of Psychopathy, Vancouver, BC.

Woodley, H. J. & Allen, N. J. (2014). The dark side of equity sensitivity. Personality and Individual Differences, 67: 103-108.

Zuckerman, M. (1994). Behavioral expressions and biosocial bases of sensation seeking. Cambridge University Press.